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La órbita lunar del Pequeño Da Vinci
Un mes es simplemente la duración de una revolución
de la luna alrededor de la tierra. Según sea el punto
de referencia del cual consideramos esta revolución, hay
meses más largos y más cortos. En realidad, no hay
ningún astro cuya órbita sea tan compleja como la de la
luna. Es fácil imaginarse, sin embargo, que ha transcu-
rrido un mes cuando la luna haya recorrido, en su curso
alrededor de la tierra, 360 grados. En ese momento
vuelve a estar en el mismo punto en relación con el
firmamento. Este mes (luna sideral) dura exactamente
27 días, 7 horas, 43 minutos y 11,5 segundos.
Pero mientras tanto, la tierra ha avanzado, a su vez,
en su camino alrededor del sol. Para volver a alcanzar
la misma posición frente al sol, la luna tiene que girar un
poco más de los 360 grados. En consecuencia, este
mes dura más, y es sólo este mes el que nos sirve para
hacer nuestros cálculos y para realizar el reloj de las
fases de la luna. Estamos hablando del mes sinódico,
que dura 29 días, 12 horas, 44 minutos y 2,9 segundos;
o sea, 29,530588 días. Si dividimos la duración de
un año de 365,2422 días por aquella cifra, obtendremos
aproximadamente 12,368 revoluciones por año. La ya
mencionada complejidad de la órbita lunar tiene como
consecuencia que las duraciones calculadas (prome-
dias) de un mes pueden variar en el mes sideral hasta
en 6 horas.
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