Qué Es La Impotencia; Cuáles Son Las Causas De La Impotencia; Cómo Puedo Tratar La Impotencia; Uso De Dispositivos De Vacío Para Tratar La Impotencia - Owen Mumford Rapport Classic Mode D'emploi

¿Qué es la impotencia?
La impotencia (o disfunción eréctil, de forma más precisa) es la
incapacidad sistemática para lograr y mantener una erección con una
firmeza suficiente que permita la penetración durante una relación sexual.
Las erecciones se producen cuando el cerebro transmite una señal sexual
a los vasos sanguíneos del pene; en consecuencia, los vasos se dilatan,
lo que atrae sangre al pene para lograr una erección firme.
La disfunción eréctil se puede producir porque los nervios y los vasos
sanguíneos no funcionan correctamente.
¿Cuáles son las causas de la impotencia?
La impotencia se puede dar de forma gradual a lo largo de muchos
meses o se puede presentar de repente, como un problema concreto
en determinadas situaciones sexuales. Las causas pueden ser físicas
o psicológicas; aunque las causas físicas suelen incluir un elemento
psicológico.
Habitualmente, una de las causas a las que más se culpa es a la edad.
Sin embargo, el envejecimiento puede afectar la frecuencia y la intensidad
del deseo, pero normalmente no afecta la capacidad para producir una
erección. No obstante, a medida que envejecemos, es más probable que
suframos determinados cuadros médicos que afecten el proceso físico
de erección.
La diabetes afecta tanto los nervios como el suministro de sangre al
pene. El 50 % de los hombres diabéticos experimentará problemas de
disfunción eréctil en algún momento de la vida.
Los problemas más comunes relacionados con el suministro de sangre
son la arterioesclerosis, que ralentiza el suministro de sangre al pene, o
un problema de fuga venosa, que se produce cuando la sangre se retira
demasiado rápidamente del pene y ocasiona la pérdida de la erección.
Determinados medicamentos usados para el tratamiento de la presión
arterial alta o la depresión pueden causar impotencia, del mismo modo
que la puede provocar el consumo excesivo de alcohol.
También se puede producir una lesión neurológica tras una esclerosis
múltiple, lesiones de la médula espinal o después de algunos tipos de
cirugías de próstata.
El estrés y la tensión de la vida diaria, los problemas matrimoniales
graves o la pérdida del empleo pueden ocasionar impotencia y,
dado que por sí sola la impotencia ya es una fuente de ansiedad,
el problema se puede retroalimentar.
¿Cómo puedo tratar la impotencia?
Lo primero que se debe hacer es admitir que se tiene un problema y,
quizás, hablarlo con su pareja.
Consultar al médico para que determine mediante una prueba sencilla
si la impotencia se debe a una causa física o psicológica es un buen
primer paso.
Existen varias opciones de tratamiento para la impotencia:
•
Los efectos adversos de algunos fármacos habituales usados para
tratar otros trastornos pueden causar impotencia; por ejemplo, los
betabloqueantes o los antidepresivos. En este caso, solo es necesario
un simple cambio en la prescripción de los medicamentos.
•
La medicación oral es apta para algunos pacientes que no sufren
enfermedades cardíacas.
•
La autoinyección de un dilatador vascular en el pene antes de cada
relación sexual es un tratamiento ampliamente aceptado.
•
Las prótesis implantadas tienen un elevado índice de éxito,
pero requieren una operación con anestesia.
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•
Si la cirugía y las inyecciones u otros tratamientos médicos no son
favorables, el método de vacío ofrece un tratamiento simple y fiable
para la impotencia.
–
Consiste en un tubo que se coloca sobre el pene para crear vacío.
Dicho vacío hace que se suministre sangre al pene y también que se
retenga allí gracias al anillo constrictor, que se coloca en la base del
pene y se usa durante la relación.
–
El método es sencillo de aprender en la intimidad del hogar y puede
convertirse en una parte normal de las relaciones preliminares.
–
El tratamiento de vacío tiene un buen índice de éxito en el
tratamiento de la impotencia.
Trastornos en los que es posible que el uso del
dispositivo de tratamiento de vacío Rapport™ Classic
requiera asistencia especial:
•
Ceguera
•
Enfermedad de La Peyronie
•
Lesiones de la médula ósea
•
Esclerosis múltiple
•
Amputación
Trastornos con los que NO se debe usar el dispositivo
Rapport™ Classic:
•
Hombres que reciben tratamiento con anticoagulantes
•
Tras la extracción de un implante peneano
•
Fibrosis causada por inyecciones en el pene
•
Antecedentes de anemia drepanocítica o cualquier otro
trastorno hemorrágico
•
Traumatismo pélvico
•
Antecedentes de priapismo
•
Cualquier problema en el que la actividad sexual ponga
en peligro la salud
Uso de dispositivos de vacío para tratar
la impotencia
Para obtener un resultado satisfactorio al incorporar el dispositivo a la vida
sexual es necesario tener expectativas realistas, motivación (incluida la
de la pareja), libido y destreza manual elevadas; así como predisposición
a variar las técnicas sexuales de la pareja. Aunque es posible que el
orgasmo masculino no se vea afectado, puede que se bloquee o que no
acabe de salir el flujo de la eyaculación, como resultado del uso de los
dispositivos de vacío.
En primera instancia, es necesario que se realicen sesiones de
práctica sin usar anillos constrictores durante unos 15 minutos al día.
Este ejercicio se debe seguir practicando una vez al día durante al
menos una semana o hasta lograr una erección satisfactoria y disminuyan
las molestias iniciales.
Se debe empezar con el anillo constrictor más holgado e ir usando
progresivamente los más ajustados. Debe seleccionar uno que mantenga
la erección, pero que no le provoque dolor. El anillo no debe mantenerse
puesto durante un período superior a 30 minutos.
Es imprescindible el uso abundante de lubricante soluble en agua para
evitar que se adhiera el tejido peneano al tubo del pene y para que se
produzca un sellado hermético alrededor del dicho tubo. El lubricante
también debe aplicarse a la zona en que entren en contacto el tubo del
pene y el cuerpo.
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